Pulido: ¿cuándo, por qué y para qué?
¿Estamos de acuerdo en que ver un coche perfectamente pulido y brillante te da ganas de salir a dar una vuelta? NADA supera la sensación de conducir tu coche recién lavado.
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Empecemos por lo básico... ¿Qué es el pulido?
Ya sea por las gotas perfectas del rocío de la mañana o simplemente por la idea de mirarte en un espejo. Para el taller profesional, esto no es diferente. Un buen trabajo de pulido o encerado puede marcar la diferencia entre un cliente entusiasmado (y por lo tanto recurrente) que muestra tu trabajo a todos sus amigos o simplemente al próximo en la esquina. Por supuesto, el pulido no se trata solo de un aspecto brillante como un espejo. Ofrece varias ventajas de protección y, en muchos casos, aumenta el valor de tu coche en unos pocos pasos sencillos.
¿Qué es el pulido?
"El pulido es el proceso de alisar y abrillantar superficies frotándolas con un producto abrasivo para eliminar todas las imperfecciones de pintura y crear un efecto apreciable de reflexión especular denominado lustre"
El principio del lijado fino y el pulido es el mismo. Empezamos con un grano grueso para retirar material y alisar aristas en la superficie, pasando luego a un grano de menor tamaño para dejar rayas más finas (más pequeñas y cercanas entre sí). El resultado es una superficie más lisa y uniforme. Al alisar la superficie y eliminar la textura de la capa superior, se reduce número de ángulos de reflexión, lo que confiere a la superficie un aspecto como «de espejo».
Hemos dicho que el pulido es una solución sencilla para reparar arañazos e imperfecciones de la pintura. Pero el pulido también puede incluso devolver la vida a su pintura. No se pierda el resumen de los pasos a seguir para reparar cada tipo imperfección en la pintura.
Piel de naranja
Tanto si se trata de un vehiculo recién fabricado como de uno de colección, la piel de naranja es un problema muy frecuente. Durante el proceso de pintado, la pintura se aplica con un espesor y una consistencia que permiten que fluya y se estire uniformemente. Si la capa es demasiado fina, la pintura no se alisa bien y deja una superficie irregular denominada piel de naranja.
Descolgamientos
Si el espesor de la capa de pintura es excesivo o irregular, se producen descolgamientos y lágrimas. Esto da al trabajo de pintura un aspecto global poco profesional y requiere más trabajo para corregirlo. Con una lima adecuada y un proceso de lijado y pulido posterior, estos defectos se pueden llegar a eliminar por completo.
Motas de polvo
Seamos sinceros. Da igual cuánto desengrasemos, limpiemos y soplemos la superficie con aire. Es imposible eliminar hasta la última mota de polvo. Es inevitable que durante el proceso se depositen en la pintura pequeñas partículas u otros cuerpos extraños, dejando pequeñas protuberancias que se pueden eliminar cortándolas y puliendo.
Pinturas desgastadas y mates
Una pintura desgastada puede arruinar un vehículo perfecto. El pulido de la superficie permite eliminar fácilmente ese aspecto velado o nebuloso y dejar el vehículo como si fuera nuevo.
Basta con lijar la capa de acabado y pulir toda la superficie para quitarle a la carrocería muchos años. Es frecuente que el agua del grifo o la lluvia ácida dejen marcas en la pintura.
Los excrementos de aves también pueden atacar la pintura. Dependiendo de la gravedad del ataque, el pulido puede reparar las manchas o hacer que sean menos visibles.
Reparación de arañazos
Las rayas con una profundidad inferior al 25 % del espesor de la capa de barniz se pueden reparar totalmente puliendo. Una forma sencilla de comprobar esto es simplemente humedecer un dedo y pasarlo sobre el arañazo.
Si la raya desaparece, podrá eliminarse puliendo la zona sin más. Las microrrayas o los arañazos circulares suelen aparecer en los túneles de lavado automático o por restos de arena en la esponja. Se trata de pequeños arañazos principalmente visibles cuando el sol incide sobre la pintura.
El pulido (manual) es una excelente forma de eliminar esas horribles rayas que las uñas, los anillos y las llaves van dejando en las manillas de las puertas. Todo el proceso se puede realizar en unos 30 minutos, y cuando haya terminado, sus puertas no estarán como si las hubiera intentado abrir un animal.
